La libertad para crear piezas y productos innovadores se realiza con la fabricación aditiva (AM), también conocida como impresión 3D. El diseño para la fabricación aditiva (DfAM) brinda la posibilidad de producir piezas complejas, con geometrías intrincadas que no se podían producir con los métodos de fabricación tradicionales.
Un elemento central del DfAM es la correlación entre la geometría de una pieza o producto, y su aplicación y función. La planificación es clave para el proceso del diseño. Con herramientas de diseño generativo (por ejemplo, optimización de topología, análisis de elementos finitos), los ingenieros pueden ejecutar una serie de simulaciones para determinar la geometría óptima sobre la base de la función, la aplicación y otras consideraciones clave que incluyen restricciones, cargas y puntos de tensión.
Además de la libertad en la geometría y la optimización, el DfAM también ofrece eficiencia en cuanto a la producción. Desde el diseño hasta la creación rápida de prototipos y la producción, los archivos de diseño digital se pueden compartir, modificar y personalizar de forma fácil para el usuario final. Otra ventaja significativa del DfAM es la consolidación de las piezas. La fabricación aditiva permite la producción de formas geométricas que, de otro modo, requerirían el ensamblaje de múltiples componentes. La consolidación de las piezas puede reducir de forma significativa los costos de ensamblaje, aumentar la velocidad de producción y mejorar el rendimiento.
Los productos de mejor rendimiento, sin embargo, son el resultado tanto de diseños como de materiales óptimos. Por ejemplo, el DfAM libera todo el potencial de las estructuras de rejilla con topología optimizada para mejorar el rendimiento de los productos. Si se elige un material de impresión 3D elastomérico, como el TPU ESTANE® 3D M95A de Lubrizol , para fabricar piezas con estructuras de rejilla, puede reducirse el peso de la pieza sin comprometer la integridad estructural, además de posibilitar un control preciso de la rigidez en regiones específicas. Producir estructuras de rejilla con el TPU ESTANE® M95A es ideal para diversas aplicaciones que requieran piezas livianas, que sean tanto flexibles y fuertes, como calzado y prótesis.
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