La demanda global de potencia de computación continúa incrementándose a un ritmo acelerado, lo que está generando la expansión del centro de datos de hiperescala. Las investigaciones recientes sugieren que se prevé que el tamaño del mercado de centros de datos de hiperescala valga $799.5 miles de millones para 2032, desde $85.3 miles de millones en 2022, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 25.8% durante el período de estimación de 2023 a 2032.
Para capitalizar este potencial, los propietarios y constructores de centros de datos de hiperescala necesitan soluciones efectivas para llevar sus operaciones a nuevos niveles. Las cargas de trabajo en estas nuevas instalaciones están aumentando de forma exponencial y, más que nunca, se necesitan capacidades de almacenamiento y procesamiento para desarrollar las empresas; los ingenieros que supervisan la infraestructura de centros de datos requieren nuevas maneras de admitir cada vez más densidad de potencia.
¿Qué es un centro de datos de hiperescala?
Si bien no hay una definición estándar de la industria, los centros de datos de hiperescala son más grandes que los centros de datos empresariales tradicionales con capacidades de rendimiento que las superan de lejos. Ofrecen inmensas capacidades de almacenamiento y procesamiento que son requeridas por importantes empresas de tecnología. Por lo general, un centro de datos de hiperescala tiene alrededor de 5,000 servidores y 10,000 pies cuadrados.
Un desafío inherente a este objetivo es mantener a los servidores cada vez más potentes a una temperatura de funcionamiento óptima. Los métodos de enfriamiento por aire tradicionales se han esforzado por satisfacer los requisitos de enfriamiento de hoy en día y de los centros de datos de hiperescala del futuro. Se requiere una solución más adecuada para permitir que estos nuevos centros alcancen todo su potencial.
¿La solución? El enfriamiento por inmersión, por el que los componentes informáticos se sumergen en fluidos dieléctricos no conductores de electricidad, ha demostrado ser muy prometedor como aplicación de enfriamiento optimizada para centros de datos de cualquier tamaño. Pero sus beneficios son particularmente idóneos para centros de datos de hiperescala, donde la densidad y potencia de procesamiento son prioritarias y donde las configuraciones de ingeniería exclusivas podrían requerir sistemas de enfriamiento a medida. Continúe leyendo para descubrir por qué el enfriamiento por inmersión podría ser la opción adecuada para su centro de datos de hiperescala.
El enfriamiento por inmersión posibilita una mayor potencia
Los métodos de enfriamiento por inmersión permiten a los centros de datos albergar y mantener la infraestructura de servidores para ofrecer una mayor densidad informática y satisfacer la creciente demanda, lo que es una necesidad para los centros de hiperescala. Asimismo, en los sistemas con fluidos de gestión térmica efectivos, se experimenta un menor tiempo de funcionamiento de los equipos.
Los sistemas de enfriamiento por inmersión también pueden prolongar la vida útil de los equipos de TI en comparación con los sistemas de enfriamiento indirecto y por aire al reducir la complejidad en el diseño de los servidores (p. ej., sin que se requieran ventiladores integrados) y reducir las temperaturas operativas para evitar la degradación térmica de los componentes de los servidores.
El enfriamiento por inmersión puede personalizarse para satisfacer necesidades exclusivas
El enfriamiento por inmersión ofrece ventajas fundamentales, ya que puede adaptarse para satisfacer los requisitos de aplicaciones actuales y futuras.
Esto es particularmente cierto para aplicaciones de enfriamiento por inmersión monofásico, en las que el hardware se sumerge en un fluido dieléctrico que está en contacto directo con los equipos de TI, lo que permite redirigir el calor a medida que el fluido fluye a través del servidor de datos. En comparación, el enfriamiento por inmersión bifásico utiliza un fluido a base de fluorocarburos que hierve fácilmente cuando entra en contacto con puntos calientes de los equipos, lo que genera la transformación del fluido de un líquido a un vapor que puede condensarse en un intercambiador de calor y volver a circularse en el tanque de enfriamiento. El enfriamiento monofásico otorga mayor potencial de personalización de fluidos, por lo que es perfecto para centros de datos de hiperescala que buscan métodos exclusivos para optimizar sus operaciones.
Los fluidos por inmersión desarrollados y diseñados específicamente para su aplicación ofrecen propiedades equilibradas y mejor compatibilidad con los materiales, y así satisfacer las necesidades de instalaciones de centros de datos y sus equipos. Al trabajar con el proveedor correcto, no es necesario conformarse con una solución de fluidos "lo suficientemente buena". Y, a medida que se incrementan las demandas de potencia, las formulaciones de enfriamiento por inmersión muy elaboradas tienen el potencial de ayudar a extender la expectativa de vida útil de su hardware.
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