Sin dispersantes, el mundo sería un lugar mucho menos colorido. Los aditivos dispersantes están presentes donde haya pigmentos. Esto significa en una enorme variedad de productos, como ese SUV azul oscuro metalizado que vio en la autopista, por ejemplo. O los pisos de placas de cerámica gris jaspeado de su restaurante favorito. O el televisor de pantalla plana Ultra HD 4K que grita su nombre en Best Buy, o una colorida bolsa de patatas fritas en las estanterías de su tienda habitual. Piense en un producto, y lo más probable es que tenga dispersantes.
Sin dispersantes, las partículas sólidas de los recubrimientos, tintas o pinturas se atraen entre sí, esto de llama aglomerado, que es una partícula más grande compusta por partículas más pequeñas. Esto puede afectar de manera negativa las propiedades deseadas, como la apariencia (opacidad, brillo, color), el rendimiento (resistencia a la corrosión, refuerzo), la compatibilidad, la estabilidad, etc.
El proceso de dispersión se realiza para acercarse tanto como sea posible al tamaño original de la partícula principal, lo que mejora el proceso de aplicación y propicia un mejor rendimiento del producto final. El proceso requiere el uso de un aditivo (un dispersante) para evitar que las partículas más pequeñas se recombinen, que es lo que hacen naturalmente. El proceso de dispersión es un paso temprano para convertir un pigmento/partícula en algo que añade valor.
Combinar el dispersante con la aplicación
Los dispersantes ofrecen una serie de beneficios únicos, personalizables para muchos tipos diferentes de aplicaciones. Las siguientes son solo algunas de esas aplicaciones específicas.
Industria automotriz
En la industria automotriz, los dispersantes en el recubrimiento de las superficies ayudan a generar versiones metalizadas de azul en un SUV, o en cualquier otro color o tipo de vehículo, para que realmente se destaquen. Ese toque destacado se logra a través del uso de pigmentos orgánicos transparentes en combinación con pigmentos de efecto metálico. Los pigmentos orgánicos se deben dispersar de manera muy fina. Esto se conoce como nanodispersión. El proceso requiere un dispersante diseñado específicamente para esta tarea, que combine con el pigmento o el recubrimiento para ofrecer una profundidad de color increíble. Debajo del recubrimiento de superficie se encuentra el recubrimiento imprimador, donde se encuentran los dispersantes anticorrosivos que aportan protección.
Cerámicos
Los cerámicos con impresión digital que parecen vetas de madera son un desarrollo bastante reciente. Para lograr efectos decorativos como este en el cerámico, solía utilizarse un proceso de impresión con mallas a 4 colores que exigía una placa de malla diferente para cada color. Lograr un efecto de piedra o aleatorio era difícil. Con la tecnología más reciente, estos tipos de cerámicos se pueden crear a partir de impresiones de inyección de tinta, más allá del sustrato. La impresión de inyección de chorro de tinta permite lograr una cantidad infinita de patrones y generarlos al azar. Los pigmentos de la cerámica son muy densos y tienen una gravedad específica alta. Esto significa que tienden a asentarse, factores que no se trasladan al proceso de impresión con chorro de tinta. Los dispersantes bien diseñados cambian el panorama y le permiten fabricar una variedad de colores para cerámicos de manera bastante efectiva. Lubrizol fue pionero en esta tecnología de dispersantes, lo que permitió la conversión de la producción en masa de cerámicos desde los procesos de impresión con mallas que limitaban los diseños, para ofrecer una variedad infinita de oportunidades a través del uso de la impresión digital.
Pantallas planas
Los dispersantes también son críticos para los colores en las pantallas de cristal líquido (LCD), que tienen un filtro rojo, verde y azul. Los filtros se imprimen sobre cristales líquidos y circuitos de interruptores, que se apagan o encienden para mostrar el píxel de color correcto. Los filtros de color se producen con un tipo muy específico de pigmento orgánico transparente. La nanodispersión y estabilización que se utiliza en las LCD es similar a las que se utilizan en los recubrimientos de autos, pero los pigmentos, recubrimientos, tintas y el proceso son bastante diferentes. La tecnología de dispersión especialmente diseñada permite una capacidad de reproducción en alta definición en la tecnología de pantalla. Las dispersiones también son clave para las diminutas máscaras negras que rodean cada filtro de color. Las máscaras se crean con negro carbón, que necesita una estabilidad y control de la dispersión excepcionales, así como propiedades de flujo y recubrimiento de las tintas, para lograr el rendimiento deseado. Las pantallas planas son otro ejemplo de diseñar un dispersante para aplicaciones muy específicas de alta tecnología.
Embalaje
Los dispersantes se utilizan en todo tipo de empaques, como empaques para alimentos de todas las formas y tamaños, por su atractivo comercial fundamental y porque propician el reconocimiento de las marcas con tintas brillantes y recubrimientos de protección de la impresión. Los fabricantes de dispersantes como Lubrizol pueden trabajar junto a los fabricantes de tintas para lograr el mismo espacio de color más allá de si la tinta o el recubrimiento son al solvente, al agua o curados con rayos UV y así se imprima con chorro de tinta, flexo o litografía. Los fabricantes de empaques pueden lograr las mismas especificaciones Pantone para la tinta sobre la que trabajan, más allá de su tipo, composición química o proceso de impresión, con tecnología de dispersión que permite un procesamiento eficaz y alta resistencia a medida que las películas se vuelven cafa vez más delgadas.
