El mercado de dispositivos médicos de diagnóstico está impulsado por las innovaciones tecnológicas, el aumento de las necesidades de atención médica y el cambio hacia una atención al paciente más personalizada y eficiente. La monitorización en tiempo real y la mayor comodidad del paciente son características clave de los dispositivos de diagnóstico modernos, que ofrecen un mejor control y reducen la necesidad de procedimientos invasivos. Los sensores mínimamente invasivos proporcionan datos continuos que son fundamentales para el manejo de afecciones crónicas y la optimización de las intervenciones terapéuticas. Los diagnósticos rápidos en el punto de atención permiten la toma de decisiones oportuna y mejoran los resultados de los pacientes. Además, los sensores de diagnóstico in vitro desempeñan un papel crucial en la detección de enfermedades, el seguimiento de las condiciones de salud y la orientación de los planes de tratamiento.